La tahina, también conocida como mantequilla de sésamo, es un básico que debería estar en cualquier despensa. Se trata de una crema preparada a partir de sésamo triturado o molido que es muy popular en cocinas como la asiática o la de Oriente Medio. Si alguna vez has comido hummus, entonces habrás probado la tahina porque es uno de sus ingredientes principales.

Aunque de entrada nos pueda parecer que su uso nos servirá principalmente para platos salados, realmente también queda deliciosa en preparaciones dulces. 

Algunas personas la sirven sobre las tostadas como sustituto de la mantequilla combinada con un poco de miel, otras lo utilizan para preparar deliciosas galletas o la combinan con chocolate.

Beneficios de la salsa de tahina

La tahina tiene un sabor intenso y ligeramente amargo y es ideal para aportar una buena cantidad de grasas saludables a tu alimentación.

Es rica en vitaminas del grupo B y muchos minerales como el magnesio, el hierro o el zinc, aunque destaca especialmente por su contenido en calcio. El calcio es muy importante para nuestra salud y la de nuestros huesos, además, también nos ayuda a contraer y relajar los vasos sanguíneos y participa en la transmisión de impulsos nerviosos, entre otras cosas.

La tahina también es rica en fibra y ácidos grasos que nos ayudan a mejorar la salud cardiovascular y regulan nuestros niveles de colesterol, y también es alta en unos antioxidantes llamados lignanos, capaces de cuidar de nuestro ADN, mejorar la función endotelial y mantener a raya los triglicéridos.

Lo mejor de la tahina es que la pueden consumir las personas alérgicas o que no toleran bien los frutos secos, ya que la tahina se prepara a partir de una semilla, la de sésamo.

Salsa de tahina con limón

Para darle un toque original y convertirla en una preparación aún más saludable, en Como Como Foods hemos creado una salsa exquisita preparada a partir de tahina y la hemos combinado con otros ingredientes también muy saludables. 

Nuestra tahina está preparada a partir de sésamo integral, ya que esto ayuda a que se mantengan muchos de sus beneficios. Y lo hemos combinado con zumo de limón, uno de nuestros antioxidantes preferidos, aceite de oliva virgen extra, para aumentar aún más su contenido en grasas saludables, y ajo, que además de encantarnos su sabor, también tiene efecto antibacteriano, antifúngico y antiviral.Para conservar la salsa y que no pierda las propiedades, simplemente se debe mantener en un lugar fresco y seco, alejada de fuentes de luz y calor, pero no necesita de frío para su mantenimiento.

¿Cómo utilizar la salsa de tahina en tus recetas?

La salsa de tahina es fantástica y se puede utilizar en la cocina de forma muy versátil. Realmente queda bien por encima de prácticamente cualquier preparación, pero igualmente te damos algunas ideas.

• Salsa de tahina para ensalada: nuestra salsa de tahina está pensada especialmente para combinar a la perfección en cualquier ensalada. Lo mejor es que, aunque la ensalada sea sencilla, el aliño le dará un toque espectacular. Prueba esta combinación que nos encanta: base de hojas verdes, cebolla roja cortada en juliana fina, tomatitos cherri, garbanzos y germinados. Ya verás qué maravilla.

• Salsa de tahina para verduras: cuece las verduras al gusto y sirve con la salsa de tahina por encima. Realmente queda bien con cualquier verdura, pero a nosotros nos encanta con brócoli o con calabaza asada al horno.

• Salsa de tahina para pasta: puedes utilizarla para acompañar un plato de pasta. Simplemente, cocina la pasta escogida y mientras tanto saltea calabacín a rodajas. Cuando la pasta y el calabacín estén cocidos, sirve conjuntamente, añade algunas hojas de espinacas baby, incorpora la salsa y un poco de pimienta fresca. ¡A disfrutar!

• Salsa de tahina para pollo: tan fácil como cocinar el pollo al gusto y servir la salsa de tahina por encima. Para que quede aún más rica te recomendamos añadir perejil fresco picado y servir con arroz de coliflor, ya verás qué deliciosa queda la combinación.

• Salsa de tahina para falafel: a modo de idea, prepara unos deliciosos faláfeles (o cómpralos hechos previamente) y sírvelos junto a la salsa de tahina. Más fácil imposible.

Estas son unas ideas, pero realmente puedes dejar volar tu imaginación y utilizarla allí donde quieras. Incorpórala en hummus, en patés vegetales, en cremas de verduras, en salsas, para untar pan de pita… ¡Lo que se te ocurra!