Pollo con olivada

Este pollo con olivada es toda una explosión de sabor mediterráneo. Disfrútalo junto a una ensalada verde aliñada con tu vinagreta favorita.

La olivada suele ser bastante salada, así que te recomendamos que no añadas sal hasta el final, incluso en el plato, solo si crees que la necesita.

15 min

2-3 personas

Fácil

Prensar o picar muy fino el diente de ajo y reservarlo.
Cortar la cebolla en juliana.
Añadir el aceite de oliva y una pizca de romero en polvo a la cacerola.
Incorporar la cebolla y saltearla a fuego lento durante unos 10 minutos, removiendo de vez en cuando. Puedes hacerlo con la cacerola tapada.
Cortar la zanahoria en rodajas y añadirla a la sartén, junto al diente de ajo que habías reservado. Saltear durante unos 2 minutos.
Apartar la cebolla a los lados para añadir el pollo y sellarlo ligeramente, unos 3 minutos por un lado y 3 minutos más por el otro.
Añadir una pizca de pimienta.
Disolver las dos cucharadas de olivada en el vaso de agua o caldo y verter la mezcla en la cacerola.
Colocar la tapa de la cacerola y cocinar a fuego lento durante unos 20 o 25 minutos, dependerá del tamaño de las piezas de pollo.
Dar la vuelta a las piezas de pollo a media cocción.
Una vez pasado el tiempo, dejar reposar durante unos 15 minutos antes de servir.
Si quieres desgrasar el caldo, coloca el pollo en una fuente y vierte la salsa en un tarro de cristal grande. Espera unos minutos a que la grasa suba a la parte superior del caldo y retírala con un cacito pequeño.