Van a venir a tu casa todos tus amigos y tienes pensado preparar un aperitivo antes de que se lancen a por la comida. Pero hace tiempo que intentas comer de forma saludable y todo lo que te pasa por la cabeza son patatas chips, aceitunas –que probablemente lleven glutamato monosódico– y conservas, de las que estás intentando huir para evitar la migración de los compuestos tóxicos de las latas hacia los alimentos.

¿Cómo preparar un aperitivo saludable?

Preparar un aperitivo saludable es realmente sencillo si sabes cómo hacerlo. Una buena opción es cocinar en casa los tuyos propios, porque es la mejor manera de saber qué ingredientes estás utilizando para su elaboración. Aunque es cierto que si nos apetece algo rápido y sencillo, encontraremos también opciones aptas que pueden convertir cualquier aperitivo en un momento muy nutritivo y saludable. 

Nosotros incluiríamos:

• Aceitunas y olivada: gracias a su contenido en grasas saludables tienen un efecto rejuvenecedor y antioxidante. A nosotros nos chiflan las aceitunas de Kalamata, pronto te explicaremos por qué, pero también puedes optar por otras variedades que te gusten. Eso sí, fíjate en que no lleven aditivos (sobre todo, evita el glutamato monosódico) ni demasiada sal. Un consejo: si estás cansado de comer las aceitunas siempre en el mismo formato, también puedes optar por incluirlas en forma de olivada con unos crackers o crudités. 
• Pepinillos y encurtidos: destacan especialmente por ser buenos digestivos (si los comes antes de la comida, te ayudarán a segregar jugos gástricos y a mejorar tus digestiones) y por tener un efecto antiinflamatorio y rejuvenecedor. Eso sí, procura de nuevo que no incorporen aditivos como el glutamato monosódico y que lleven el mínimo de ingredientes. Nuestros pepinillos están preparados a partir de agua, vinagre de manzana, sal marina y vitamina C para conservarlos mejor. Están increíbles. 
• Alcaparras: las alcaparras son una fuente increíble de quercetina y rutina. Esto les brinda un gran poder antioxidante y también se vinculan a la salud del sistema circulatorio. Tienen pocas calorías e hidratos de carbono y son las compañeras ideales de un buen aperitivo.
• Aceite de limón: nos chiflan los aceites macerados. Pueden convertir cualquier plato sencillo en una auténtica delicia. En concreto, el de limón es ideal para disfrutar de un buen aperitivo gracias a su sabor refrescante y aromático. Prueba de echarle un chorrito de aceite de limón y un poco de pimienta negra fresca molida a tus berberechos o mejillones para que suban de categoría.
• Salmón en conserva: la forma más sencilla de incorporar omega-3 a la alimentación. Sin necesidad de cocinar, ni dejar la casa con olor a pescado. El salmón, y más si es salmón salvaje de Alaska, es un antiinflamatorio muy poderoso, cuida la salud cardiovascular y mejora el rendimiento cognitivo, además de ser rico en vitaminas y minerales. Sírvelo junto a un poco de olivada, encima crackers o tostadas de trigo sarraceno. Si quieres que quede espectacular, corónalo con unas alcaparras.

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